

La cromoterapia funciona aplicando distintos colores, aportando una nueva energía a la luz. De esta forma el ser humano percibe distintas sensaciones y asimila vibraciones adecuadas a su estado anímico. Esta técnica se remonta a las antiguas culturas de la India, China y Grecia, y su eficacia depende de las características de cada paciente.
Puede usarse como tratamiento para pequeños altibajos en el estado de ánimo o problemas en el organismo como la alta presión sanguínea, estructura ósea débil, infecciones, obesidad, anorexia, etc. Pero siempre debemos tener en cuenta que esta técnica alternativa no sustituye en ningún caso un tratamiento médico recetado por el médico.
Beneficios de cada color en cromoterapia
Cada tonalidad cumple una función, por ello os especificamos los beneficios de cada color en cromoterapia. Mientras que algunos nos ayudan a relajarnos, otros son buenos para la concentración o para aumentar nuestra energía. Algunos ejemplos son los siguientes:
-Azul: los colores fríos como el azul son buenos para la concentración. Además tiene un efecto calmante, lo que ayuda a reducir el estrés, la ansiedad e incluso el dolor físico. También ayuda a combatir el insomnio, así como el asma, la fiebre, el sobrepeso y la celulitis.


-Rojo: pertenece a la gama de los colores cálidos y es perfecto para realizar ejercicio físico, pues aporta grandes dosis de energía. Facilita la circulación sanguínea, y lucha contra la bronquitis, la impotencia y el reumatismo. Por el contrario, es perjudicial en casos de ansiedad y trastornos emocionales, algo que también nos ayudará a saber para qué sirve la cromoterapia.
-Naranja: reduce la fatiga y estimula la función del sistema respiratorio. También favorece la asimilación de calcio y la acción de los riñones.
-Amarillo: se considera purificante y desintoxicante. Tiene propiedades antisépticas y aporta energía al sistema digestivo. Estimula también la actividad cerebral, y combate distintos desequilibrios del organismo. Se trata de una de las tonalidades fundamentales con objeto de saber para qué sirve la cromoterapia.
-Violeta: favorece la inspiración y combate la ansiedad. Es muy importante para el desarrollo espiritual, y tiene efectos positivos sobre la epilepsia, la anemia y las contracturas.
-Verde: tiene efecto sedante y se asocia a la naturaleza y a la vida. Representa la paz, el equilibrio y el bienestar espiritual. Se usa para paliar dolencias cardíacas, problemas circulatorios, estrés e hipertensión. Además, combate las úlceras y el dolor de cabeza.


-Blanco: está asociado a la purificación, la limpieza y la claridad. Aporta dinamismo al mismo tiempo que paz, armonía y calma. Es perfecto en casos de ansiedad y depresión.
Estos son sólo algunos de los usos que nos ofrece la cromoterapia, cuyos resultados son más o menos efectivos según las características de cada persona. Es una terapia suave, inofensiva y siempre complementaria a otros tratamientos médicos.
¿Qué os parecen estos puntos en aras de saber para qué sirve la cromoterapia?