

Si nos la vamos a pintar en relación a una ocasión especial debemos atender a qué ropa vamos a llevar ese día. Si el esmalte no tiene porqué combinar con ningún look en particular, podemos orientarnos por los colores que solemos utilizar en nuestro día a día.
Cómo elegir el color del esmalte de uñas
Para elegir elegir el esmalte de uñas que más va contigo, debes hacerlo en función de los siguientes factores:
Tono de la piel
-Piel clara: Los tonos que mejor encajan con las pieles blancas son el rojo, el negro y los rosas pálidos. Ahora bien, si lo que se busca es sacar el máximo impacto pueden apostar por fucsias y colores muy intensos.
-Piel trigueña: En este caso es mejor evitar los rojos y utilizar colores anaranjados o incluso azules.
-Piel oscura: Aquellas que tengan la piel oscura tienen la suerte de que cualquier color les quedará bien, excepto los tonos demasiado oscuros.
Por otra parte, los tonos naturales o suaves como el beige, mate, blanco, crema o marfil siempre quedan maravillosamente independientemente del tono de la piel.
El acabado perfecto pasará necesariamente por añadir una capa de brillo cuando el esmalte de uñas esté bien seco sobre las mismas. Además, es importante no tenerlas siempre pintadas, si no darle un espacio de tiempo a las uñas entre pintura y pintura con el fin de que transpiren y no se estropeen.
Forma de las uñas según las manos
A veces las modas no nos favorecen, por eso no siempre hay que obsesionarse con ellas. Si nuestras manos son más bien pequeñas y los dedos son cortos la forma redondeada dará la sensación de que la mano es más estilizada.
Las manos con dedos largos pueden decantarse por unas uñas cuadradas con los bordes redondeados. Y, en cuanto a las manos medianas, la uña ovalada y de tamaño grande será la ideal. Aunque, en estos casos, casi podrían escoger cualquier forma para sus uñas.
¿Qué os parecen estas ideas para elegir el esmalte de uñas que más se ajusta a vuestras características personales?