Olvídate de esperar con el cuento de que el amor llamará a tu puerta cuando menos te lo esperes. Te invitamos a que tomes las riendas de tu vida y seas tú quien decidas dar el paso e ir a por esa persona que te gusta.
Para empezar, olvídate de la frialdad de las redes sociales. Empieza conociendo gente nueva apuntándote al gimnasio, a clases de baile o cualquier otra actividad en la que te encuentres a gusto, ya que será el lugar perfecto en donde poder conocer a un hombre que comparta tus aficiones.
A la hora de conocer a la persona…
Llegado el momento de conocer a esa persona que te atrae, muéstrate tal y como eres. No engañes a nadie, se natural, una relación no se puede cimentar sobre mentiras o acabará mal. Por otro lado, tampoco fuerces la situación, si no es para ti, no será nunca para ti.
Cuando estés con esa persona, si surge la magia, os daréis cuenta porque la noche se os pasará volando y estaréis deseando veros de nuevo al día siguiente.
Para una segunda cita, te sugerimos un cine o un restaurante serio, es decir, una cita un poco más íntima alejada de la barra de un bar. Deja que el chico coquetee contigo, a ellos les gusta sentirse conquistadores.
Tampoco tengas prisa por ir a su casa o llevarle a la tuya, un paseo romántico de la mano con el buen tiempo, servirá también para descubrir las intenciones que tiene ese hombre, descubriendo si su interés es pasajero o sin embargo quiere algo más. En verano, gracias al buen tiempo, es el momento ideal para vivir esas noches románticas paseando a la luz de la luna.
Para terminar, si sientes que esta nueva relación funciona, esfuérzate en hacerla duradera, ya que en realidad cuesta mucho conocer personas que merezcan la pena de verdad.
