

A continuación, te mostramos algunos sencillos consejos para conseguir un pelo de cine sin necesidad de dejar temblando tu cuenta corriente:
1. Cortar las puntas, por lo menos, una vez cada 6 u 8 semanas es fundamental para aportar fuerza y volumen al cabello. La actriz Jennifer Aniston, envidiada siempre por su preciosa melena, ha declarado en más de una ocasión que procura cortar sus puntas regularmente.
2. A la hora de lavarlo, procura no frotar con fuerza el cuero cabelludo, ya que con esto sólo conseguirás irritar la piel y dañar la estructura capilar. Por el contrario, realizar suaves masajes con la yema de los dedos activará la circulación sanguínea del cuero cabelludo haciendo que el pelo nazca más fuerte y crezca más rápido.
3. Al igual que un buen champú, es imprescindible el uso de acondicionadores y mascarillas especialmente diseñadas para nuestro tipo de cabello. Las mascarillas caseras elaboradas con productos naturales pueden ser utilizadas siempre que queramos, y es recomendable aplicarlas únicamente de medios a puntas para no aportar un exceso de grasa a la piel.


4. Un último aclarado con agua fría es también un buen truco para activar la circulación sanguínea y aportar así más brillo al pelo.
5. Recuerda que el cabello es mucho más débil cuando está mojado, por lo que trata de desenredarlo con suavidad con un peine de púas anchas y aplica un protector térmico antes de secarlo si utilizas secador, planchas o rizadores habitualmente.
6. Utiliza productos especiales para minimizar el daño que puedan causar el sol o el cloro de las piscinas en la salud de tu pelo. La mayoría se comercializan en formato spray, siendo muy cómodos de aplicar en cualquier momento.
7. La salud del cabello no debe tratarse sólo desde el exterior, sino que la alimentación juega un papel muy importante en su aspecto. Beber abundante agua a lo largo del día otorga a nuestra piel y a nuestro pelo la hidratación que tanto necesitan. Los alimentos ricos en biotina o vitamina B7, ayudan a que crezca más rápido, bonito y fuerte. Consumir regularmente levadura de cerveza y germen de trigo, muy ricos en esta vitamina, es un hábito muy beneficioso con el que notarás rápidamente los resultados.