Tomando esta teoría como base, podemos enumerar algunos trucos o consejos para reforzar esta pérdida de peso durante las noches.
Trucos para perder peso mientras dormimos
1. Hacer ejercicio. Encontramos una especie de retroalimentación entre la actividad física y el descanso, pues necesitamos descansar para reponernos de la energía que gastamos con el movimiento físico, y al mismo tiempo el ejercicio nos ayuda a reducir el estrés y a conciliar el sueño. Por eso se recomienda hacer deporte unas cuatro o cinco horas antes de irse a la cama. Además, el ejercicio es esencial para perder peso de forma sana.
2. Acostarse siempre a la misma hora. Un horario fijo y adecuado favorecerá el buen funcionamiento de nuestro organismo, con lo que las digestiones serán menos pesadas y asimilaremos más fácilmente las vitaminas de los alimentos.
3. Cenas ligeras. Es bien sabido que consumir alimentos ricos en grasas antes de irse a dormir dificulta la digestión e impide que conciliemos el sueño. Asimismo, es recomendable cenar al menos dos horas antes de acostarse.
4. Sueño ininterrumpido. Es importante que durmamos al menos ocho horas seguidas, ya que durante el descanso profundo el cuerpo aumenta los niveles de la hormona del crecimiento, la cual reduce la grasa. Por esta razón debemos crear un ambiente agradable sin ruidos, a oscuras y sin elementos que puedan distraernos.
5. Una actividad relajante. Si sufrimos insomnio, podemos probar realizando una actividad relajante justo antes de ir a dormir. Por ejemplo, darnos un baño caliente o escuchar música suave.
6. Infusiones. Existe una gran serie de infusiones que nos ayudan a conciliar el sueño, y que además, poseen un fuerte efecto antioxidante. Ello favorece que eliminemos las toxinas de nuestro cuerpo, lo que acelera el proceso de adelgazamiento.
7. Dormir al menos ocho horas diarias. Es el tiempo que recomiendan los expertos para un buen descanso. Los estudios demuestran que la gente que duerme menos de cinco horas pueden llegar a ganar hasta 4,3 kg más que las que duermen ocho.
8. Aleja los aparatos electrónicos de tu cama. Se dice que este tipo de accesorios dificultan nuestra capacidad de dormir plácidamente. Por ello es mejor que mantengamos alejados el móvil, la televisión y el ordenador.
9. Establecer una rutina. Debemos establecer unos patrones diarios de sueño, acostándonos siempre a la misma hora y en el mismo lugar. Las cabezadas espontáneas en el sofá o en el transporte público no son reparadoras, por lo que aumentan el estrés, y con ello, la tendencia a engordar.
10. Dormir un máximo de nueve horas. De la misma manera que no debemos dormir menos de ocho horas, tampoco es recomendable dormir mucho más, ya que nos levantaremos aún más faltos de energía.
Si tienes el problema de no conseguir dormir bien, puedes seguir los consejos que te proponíamos en este post: ¿Qué hacer para dormir por la noche?
