

Hoy 3 de septiembre pasará a la historia de Irán como el primer día en el que una mujer es elegida ministra de Sanidad por la mayoría de los parlamentarios de la cámara. Marzieh Vahid Dastyerdí, es una ginecóloga y tiene 56 años, con 175 votos favorables de los 286 emitidos, Dastyerdí será la primera mujer iraní en gestionar una cartera pública desde que hace 30 años se iniciará la revolución islámica en el país.
Dastyerdí no ha sido la única fémina en presentarse a un alto cargo del actual Gobierno iraní, ya que ha habido dos mujeres más que optaban a la cartera de bienestar, educación y seguridad social y que no han conseguido oponerse a sus rivales, hombres.
La importancia de este hecho en un país como Irán, supone un antes y un después en la política y sociedad del país asiático. En Irán, todavía muchas mujeres están obligadas a complacer a su marido y pueden ser condenadas a la lapidación por cualquier sospecha de infidelidad. Por eso y muchas más razones que forman parte del entramado de la sociedad iraní es todavía más relevante que Dastyerdí sea la titular del un ministerio.
Hoy, ante muchos de sus compañeros de trabajo Dastyerdí tendrá que demostrar que su profesionalidad es igual de cuestionable que la de un hombre y que en Irán las mujeres luchan, pensando y organizándose inteligentemente, por conseguir exactamente lo mismo que un hombre.
Desde luego este, es un ejemplo de trabajo y superación por parte de la sociedad iraní femenina, de la que la nueva ministra de Sanidad será un ejemplo. Ante un clima que no ayuda, sumergidas en una cultura donde impera el machismo, las mujeres levantan el puño y elijen sus decisiones.
Imagen: El País
«Dastyerdí tendrá que demostrar que su profesionalidad es igual de cuestionable que la de un hombre» ¿Acaso hay que demostrar la profesionalidad si se es mujer? Creia que las demostraciones de profesionalidad son por parte de todas las personas que tienen una responsabilidad, hombres y mujeres.