Hace tiempo que estos suplementos están rodeados de polémica. De hecho el año pasado la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad (Sedo) advirtió sobre los peligros de estas sustancias, que fueron prohibidas en Estados Unidos en los años 70 y en España en la década de los 90. Asimismo, la Food and Drug Administration (FDA) de Estados Unidos también ha informado sobre los peligros que entraña consumir estos fármacos.
Muchas de estas pastillas no están reguladas por ninguna institución, lo que puede causar graves efectos secundarios. Y es que muchas de ellas contienen ingredientes que no son nombrados en sus etiquetas, como sibutramina, fenproporex o furosemida, que no están aprobados para su uso en medicamentos para la pérdida de peso.
Efectos de las pastillas para adelgazar
Entre los posibles efectos de las pastillas para adelgazar encontramos náuseas, aumento del ritmo cardíaco, dolor de cabeza y de estómago, hipertensión, pérdida de cabello, impotencia y depresión. Además pueden provocar fuertes reacciones alérgicas, poniendo en verdadero peligro nuestra salud. Por otra parte, los estudios demuestran que la mayoría de estos medicamentos ni siquiera nos ayudan a perder peso.
Los problemas digestivos son muy comunes cuando se consumen estas sustancias. Esto se debe sobre todo a que contienen bloqueadores de grasa que reducen la absorción de nutrientes, provocando así inflamación estomacal, dolor abdominal y diarrea. Además, muchas de ellas combinan cafeína con otros diuréticos, lo que desemboca en una deshidratación extrema.
Otro detalle a tener en cuenta es que pueden provocar reacciones adversas al ser consumidos junto a otros fármacos. Por ejemplo, influye en el efecto de la anestesia y en el de algunos antibióticos. Es por ello que debemos informar siempre a nuestro médico antes de comenzar a consumir cualquier medicamento.
Debido a su alto contenido en componentes estimulantes, estas píldoras para adelgazar aumentan peligrosamente el ritmo cardíaco, con lo que aumentan notablemente el riesgo de sufrir problemas cardiovasculares.
Muchas de ellas dicen contener tan sólo ingredientes naturales, algo que solemos asociar a sustancias inofensivas. Pero al contrario de esto y debido a que los procesos de fabricación no son monitoreados, las plantas cultivadas para la fabricación de estos fármacos pueden ser identificadas erróneamente o sustituidas a propósito por otras. Asimismo, muchos ingredientes herbales interactúan con muchos medicamentos de prescripción.
Lo cierto es que para perder peso la única solución es optar por una alimentación equilibrada y practicar ejercicio regularmente. Todo se reduce a adoptar un hábito de vida saludable.
Si quieres conocer los efectos de otro tipo de medicamentos, os recomendamos leer nuestro artículo "Qué debes saber sobre la píldora anticonceptiva".
¿Conocías los riesgos que pueden conllevar estas pastillas para adelgazar?
