

Entre las numerosas ventajas de estas mechas podemos nombrar su facilidad de aplicación, así como el largo tiempo que es necesario entre retoques y el hecho de que son aptas para todo tipo de cabello. Ya sea corto o largo, liso o rizado, o cualquiera que sea su color, las mechas californianas cuentan con una amplia variedad de técnicas de aplicación, por lo que se adaptan a diferentes estilos.
En el caso de que tu pelo sea moreno, lo primero que deberás tener en cuenta a la hora de pensar en este look es que es imprescindible respetar el color de la raíz para obtener resultados favorecedores. Para aplicar este degradado, deberás elegir el tono que mejor se adapte a tu color de cabello natural.
Para un pelo muy oscuro no es nada aconsejable aplicar tintes demasiado rubios, pues a pesar de que el propósito de esta técnica es imitar el aclarado natural del pelo bajo los efectos del sol, un contraste de color demasiado fuerte quedará artificial y antiestético. Lo mejor es aclarar algunos tonos para lograr el efecto deseado.
En definitiva, la forma ideal de aplicar las mechas californianas en morenas es degradar el cabello desde la mitad de la melena hasta alcanzar un tono castaño en las puntas. Se trata de un estilo perfecto para este tipo de pelo, pues logra un efecto mucho más natural que las mechas tradicionales.
Fuente Imagen por Vogue