

El ritmo frenético con el que emprendemos todas y cada una de las actividades diarias, así como el estrés al que un porcentaje considerable de la población está sometida, terminará por alterar nuestro sistema nervioso. Esto último, unido a la falta de descanso, llegará a deteriorar nuestra salud a medio o largo plazo si no tomamos las medidas necesarias desde un principio.
Muchas veces no somos conscientes de los excesos o el escaso cuidado que prestamos a nuestro organismo, pero hemos de procurar desde una edad temprana incluir hábitos más saludables que ayuden a mantenernos en perfectas condiciones con el paso del tiempo. Uno de los factores más importantes es el sueño, por ello hemos de optar por un colchón que nos aporte el confort y comodidad que nuestro cuerpo necesita al finalizar el día.


Aunque nuestro colchón aparentemente se presente en buenas condiciones, lo cierto es que el mero hecho de soportar nuestro peso durante unas 7 u 8 horas los siete días de la semana llegará a reducir su firmeza con el paso del tiempo.
Dormir sobre un colchón desgastado e inadecuado llegará a producir dolores musculares, ansiedad, fatiga física y psíquica, falta de concentración o déficit de memoria. En el caso de que cuando te levantes por la mañana, notes que no has descansado lo suficiente o con ciertas molestias en espalda y zona lumbar, es el momento de cambiar de colchón.
A la hora de comprar uno nuevo, hemos de considerar dos factores clave como son el grado de firmeza y la sensación térmica. A esto hemos de añadir otros elementos primordiales a los que debemos prestar atención como son la elasticidad, la transpirabilidad (aunque mantienen mejor el calor, los colchones de látex y de espuma no se ventilan tan bien como los de muelles), la firmeza, las posibles alergias, la calidad de los materiales que lo componen, y la posible renovación de colchón y/o somier a los 8 o 10 años.


A pesar de que una de las opciones más demandadas hasta el momento era el colchón de muelles, también podemos destacar otras modalidades en el mercado para que puedas optar por la que mejor se ajusta a tus preferencias, disponibilidades económicas y bienestar. Este último es el caso de los colchones de látex, de espuma o viscoelásticos.
En el caso de los colchones de muelles bicónicos, uno de sus principales problemas es que esta modalidad termina por ceder con el tiempo y a hundirse en el centro, por lo que terminarás adoptando una postura incorrecta del cuerpo, además de que no reducen presiones en el descanso. Igualmente, pueden llegar a ser especialmente fríos porque apenas conservan calor.
Además de los colchones de muelles, dispones en el mercado de otra clase de colchones, como son los colchones de látex, más elásticos y mullidos. Los colchones viscoelásticos, con efecto de reducción de presiones, o los colchones de HR (espumaciones técnicas) que son más firmes. Estos materiales están desarrollados para adaptarse mejor al cuerpo, aportar un descanso más adecuado y mantenerse en mejores condiciones durante su vida útil.


De entre todos estos modelos, destacaremos el colchón de material viscoelástico formado por una o más capas. Uno de sus rasgos más sobresalientes es su capacidad para adaptarse a nuestro cuerpo, siempre en función de factores relacionados con la temperatura y presión que se ejerce sobre el mismo.
Este material se adapta a la forma de nuestro cuerpo, acompañando al mismo cuando cambiamos de postura. Son ideales para reducir la presión corporal, ofreciéndonos un mayor descanso y aliviando la ansiedad acumulada a lo largo del día. Existen muchos tipos de colchones viscoelásticos, por lo que lo más adecuado es consultar con expertos del descanso para averiguar cuál es el mejor para cada persona.
También has de recordar que los colchones viscoelásticos son ideales para las personas con problemas de salud que se ven obligadas a permanecer en la cama durante una larga temporada.


Finalmente, podemos destacar los colchones de muelles ensacados. Son colchones que se pueden combinar con látex, viscoelástica o HR y se comportan de manera extraordinaria en el descanso. Mantienen la independencia de lechos para que los movimientos de un durmiente no perjudiquen al descanso del otro. Son muy transpirables y resistentes, una excelente opción si buscamos un colchón firme.
El colchón puede ayudarnos a mejorar o empeorar nuestra salud física y mental, por ello es muy importante prestar atención a este tipo de productos y optar siempre por los de mejor calidad.
Yo soy una persona nueva desde que descubrí los colchones viscoelásticos, de verdad. Fui a una gran superficie de colchones, Comunidad Colchonera se llama, y ahí me recomendaron el colchón que mejor se adaptaba a mis necesidades. Y acertaron de lleno.