

ÍndicePiel normal Piel seca Piel grasa Piel mixta Piel sensible La limpieza facial permite la oxigenación de la piel, retrasa la aparición de las arrugas, ayuda a eliminar el acné y los puntos negros, aporta suavidad y mayor luminosidad. Una vez finalizado este tratamiento, nuestra piel estará preparada para aprovechar al máximo las propiedades que nos ofrecen los diversos productos cosméticos.
Tipos de limpieza facial según cada piel
Para cuidar de nuestra salud cutánea como es debido, es preciso conocer qué tipo de piel tenemos porque de no ser así corremos el riesgo de tomar decisiones inadecuadas y que podrían afectarnos negativamente.
Así, por ejemplo, resulta dañino para una piel grasa aplicar cremas a base de aceite y, como consecuencia, es posible sufrir brotes de acné y espinillas. La limpieza facial más apropiada para cada tipo de piel es la siguiente:
Limpieza facial para piel normal
Con el término "piel normal" queremos hacer referencia a las pieles que gracias a su óptimo nivel de elasticidad siempre se mantienen suaves y/o flexibles. Al no ser sensible, cuenta con una óptima circulación sanguínea.
Las pieles normales son las que menos dedicación precisan de nuestro listado, lo que no quiere decir que no necesiten hidratarse. Esta piel ha de limpiarse minuciosamente todos los días de la semana, tanto por la mañana como por la noche.
Lo idóneo es utilizar una leche limpiadora o un desmaquillador facial en formato crema. Igualmente, se ha de realizar una limpieza exfoliante, al menos, una vez a la semana. Las partículas del exfoliante ayudarán a eliminar las células muertas y suavizar la superficie de la piel, respetando en todo momento su equilibrio natural de hidratación.
El gel exfoliante purificante que nos acercan marcas como Nivea puede ser una muy buena opción. Por otro lado, las cremas faciales hidratantes con vitamina E y protección solar defenderán nuestra piel de los agentes ambientales y nos ayudarán a prevenir el envejecimiento prematuro.
Limpieza facial para piel seca
Por su parte, la piel seca presenta una textura más fina que el resto. Al igual que sucede con la piel grasa, precisa de una mayor atención que las demás. Hemos de intentar mantener un equilibrio en su ph, evitando que tenga un exceso de brillo y que tampoco se note al borde de la deshidratación.
Una rutina de belleza que podemos seguir comenzaría con un tónico o leche limpiadora específica para pieles secas y con un algodón ir retirando poco a poco los restos de maquillaje. Una vez tengamos la piel libre de suciedad, pasaremos a limpiar la cara con un jabón facila con ph neutro. Posteriormente, pasaremos a elaborar una mascarilla exfoliante que dejaremos actuar durante unos minutos sobre nuestra piel para, posteriormente, remover todos los puntos negros y espinillas que queden.
Para estos casos podemos probar con un exfoliante de avena y almendras, que será de utilidad para hidratar la piel y equilibrar su ph. La almendra contiene importantes cantidades de vitamina E y antioxidantes, que son capaces de eliminar toxinas y mejorar el aspecto de la piel.
También podemos elaborar una mascarilla de azúcar gruesa y aceite de oliva, que será de utilidad para eliminar los puntos negros y mantener los poros de la piel completamente limpios.


Una vez hayamos retirado la mascarilla, pasaremos de nuevo un algodón con tónico para cerrar los poros. Finalmente, uno de los pasos más importantes es el de hidratar la piel. Podemos encontrar diversos tipos de cremas, pero nosotros os recomendamos hacerlo con aceite de oliva.
Para ello, solo necesitas media cucharada de aceite, crema hidratante de uso habitual y un poco de algodón. El aceite de almendras también es una muy buena opción para mantener la piel seca hidratada.
Limpieza facial para piel grasa
En la limpieza facial para pieles grasas, hay que recordar que estas últimas se caracterizan por su aspecto brillante, poros dilatados y propensa a presentar espinillas, también precisan de una limpieza facial detallada. Es conveniente que limpies tu piel dos veces al día, una por la mañana y otra por la noche.
Para ello, como en los casos anteriores, es importante que retires la suciedad acumulada. En estos casos, puedes utilizar productos específicos para este tipo de pieles como "Mousse limpiador de Ntaura Siberica", "jabón de arcilla Ghassoul de Missha" o "espuma limpiadora de arroz de Skin 79. El siguiente paso lo encontramos en la exfoliación.
Hay determinados jabones que te pueden ayudar en esta tarea. Es el caso, por ejemplo, del jabón de arcilla, perfecto para las pieles con acné o el azufre, que limpia en profundidad. El aceite de té desinfecta ligeramente la piel y consigue regular el exceso de grasa.
Limpieza facial para piel mixta
La limpieza facial para pieles mixtas, situadas a medio caballo entre las grasas y las secas, debe comenzar con la aplicación de agua micelar para retirar la suciedad acumulado en la piel. Acto seguido hemos de aplicar tónicos hidratantes y nunca astringentes.
Al mismo tiempo, estaremos aumentando la permeabilidad de la piel para que las cremas hidratantes utilizadas sean más efectivas.
A nivel de exfoliación para eliminar las impurezas y células muertas, podemos servirnos del exfoliante de pepino Handmade, que podrás utilizar a modo de mascarilla durante unos diez minutos. A la hora de hidratarla, hemos de procurar elegir mascarillas a base de arcilla o avena, idónea para aplicar, al menos, una vez a la semana.
También podemos elaborar una mascarilla de manzana y mezclarla con una cucharada de miel. Solo has de aplicar la pasta sobre tu rostro y dejarla actuar durante 10 minutos. Para retirarla lo mejor es utilizar agua fría.
Limpieza facial para piel sensible
En el caso de las pieles más sensibles, podemos iniciar nuestra limpieza con leche desmaquillante hidratante, idóneo para proteger nuestra piel durante los meses más fríos. Una vez eliminamos los restos de maquillaje, podemos servirnos de productos como aguas florales como son las de lavanda o las de romero.


En cuanto a la fase de hidratación, podemos servirnos de cremas hidratantes como Organic Marigold de MuLondon, tres o cuatro veces al día en las zonas más irritadas de la piel. Tampoco hemos de olvidarnos de un buen filtro solar, imprescindible cuando se utilizan cosméticos con aceites esenciales o con principios activos iluminadores. Son idóneas para estos casos, la manteca de cacao o de karité.
¿Qué os parecen estos recursos de limpieza facial para cada tipo de piel?, ¿qué utilizáis vosotros?