

A primera vista, las prendas rojas pueden parecer difíciles de combinar, por lo que muchas veces decidimos prescindir de ellas. Pero lo cierto es que haciendo uso de colores neutros y algunos pequeños trucos podemos conseguir un resultado espectacular.
Consejos para combinar un vestido rojo
En primer lugar, debemos decir que todo depende del estilo del vestido del que se trate: juvenil, de fiesta, largo, holgado, ceñido… Según el aspecto que queramos conseguir, utilizaremos unas complementos determinados. Por ejemplo, unas botas o botines no serían adecuados para un evento elegante, pero sí para una ocasión informal.
Uno de los detalles que más quebraderos de cabeza nos causa en este sentido es el bolso. Tendremos que tener en cuenta su estilo: dependiendo de la clase de evento al que vamos a acudir elegiremos distintos modelos.
Por ejemplo, si se trata de una fiesta elegante lo más acertado sería llevar un cluth de algún tono neutro como el negro, o añadir algo de brillo con el plata o el dorado. Para el día a día podemos optar por un bolso más informal, en forma de saco o bandolera, de color neutro o algún estampado llamativo para dar vida al look, como el floral print.


Con el calzado ocurre algo parecido. Los clásicos salones negros son un acierto seguro para las ocasiones formales, aunque si lo preferimos podemos usarlos del mismo tono que el vestido (nunca parecido) y dejar el toque de color para otros complementos. El azul marino y el nude también son una buena opción para reuniones más casuales.


Por otro lado, en nuestro día a día podemos usar todo tipo de botines y botas para combinar esta prenda durante la época de entretiempo. Lograríamos un punto chic si usamos unas botas mosqueteras, que han sido tendencia durante los últimos años. En este caso, siempre tendríamos que optar por un vestido corto. Las sandalias de cuña, las bailarinas y las zapatillas de tela también son una buena alternativa, ya sean negras, grises, blancas, azul marino o rojas. También podemos decantarnos por un animal print, aportando originalidad al outfit.
Por otro lado, conseguiremos un extra de sofisticación combinándolo con un blazer, un detalle ideal para un estilo working girl. El negro será un acierto seguro, pero el beige y el blanco también quedarían perfectos. Aplicamos la misma regla al cinturón; de usarlo, se recomienda que sea fino y discreto, para dejar todo el protagonismo al vestido.


Es por ello que los expertos en moda aconsejan no abusar de las joyas. En este caso hay que aplicar la regla de "menos es más" y lucir tan sólo unas pocas pulseras o un colgante. El dorado en estos accesorios sería el tono más acertado.
¿Qué otras ideas para combinar un vestido rojo añadiríais vosotros?