

¿Cuándo debo cambiar de colchón?
Cada ocho o diez años, los componentes del equipo de descanso ven mermada su calidad inicial hasta el punto de que su uso, más allá de este período indicado, puede perjudicar seriamente nuestro descanso. Para mantener las condiciones del colchón, es fundamental contar con una buena base. Si esta última se ve dañada, puede restar efectividad al propio colchón. En lo referente a la almohada, estudios confirman que lo recomendable es renovar cada dos años aproximadamente.
Lo cierto es que con un buen mantenimiento del colchón, el desgaste del mismo será mucho más progresivo. Las evidencias más claras de este deterioro, además del tiempo que ha pasado desde la fecha de compra, habría otras como levantarse con dolor de espalda y la sensación de no haber descansado. Más del 30% de la población española asegura levantarse sin energía e, incluso, con dolores musculares cuando su colchón tiene más de 10 años.


Cuando cambies el colchón, también es recomendable cambiar el somier. A la hora de llevar a cabo tal acción, resulta conveniente contar con la ayuda de un especialista para que te recomiende la mejor opción.
No se ha de pasar por alto el hecho de que el colchón puede estar dañado en su interior mucho antes de que su aspecto externo lo delate y el producto deje de atender al calificativo de confortable.
Consejos para elegir el colchón más apropiado
A la hora de elegir el colchón más apropiado para vosotros, hemos de fijarnos que la superficie del mismo sea firme porque nuestra columna vertebral no puede coger posturas extrañas ni vicios innecesarios cuando dormimos. Para que no sufra innecesariamente, debe mantenerse en su postura natural. Igualmente, la superficie del descanso ha de ser homogénea porque también ha de mantener el apoyo en toda la superficie del cuerpo, dado que no debe de tener hundimientos ni huecos de gran tamaño. Finalmente, la superficie ha de ser adaptable, puesto que ha de ajustarse a todas y cada una de las características de nuestro cuerpo.


De entre los diferentes tipos de colchones existentes en el mercado, se destacarían los de látex, que son hipoalergénicos y resistentes tanto al polvo como a la suciedad. Esta clase de colchones que son flexibles, pero indeformables, facilitan la circulación sanguínea al no crear puntos duros. Mientras el látex natural genera una gran elasticidad, el látex sintético ofrece el grado de firmeza necesaria. Por su parte, los colchones de muelles son muy apropiados para las personas que tienden a sudar porque no presentan problemas ante la humedad y transpiran adecuadamente. Sin embargo, carecen de compresión para que pueda ceder a las diferentes presiones de nuestro cuerpo.
Por su parte, los de espuma tienen la ventaja de que se pueden cortar a medida para adaptarlos a diferentes espacios de descanso como cunas o sofás.
En espacios como eve Sleep encontraremos colchones de calidad, ajustados a nuestra necesidades y que nos ayudarán a conciliar el sueño. Después de muchas pruebas y esfuerzos realizados, en esta empresa han inventando el colchón más cómodo y apropiado para tu salud.


Desde eve Sleep apuestan por una espuma viscoelástica, que distribuye la presión de manera completamente uniforme, logrando una superficie de descanso mucho más cómoda. Pero, como muchos han considerado este modelo de colchón demasiado caluroso, en eve Sleep han desarrollado un nuevo material para dormir mejor y más cómodo. El sistema de capas que utilizan y la espuma viscoelástica de última generación, ofrecen una mayor amortiguación y un descanso mucho más reparador.
El resultado de todo este trabajo es un colchón de cubierta con tela suave, viscoelástico envolvente, capa de ventilación transpirable y dispuesto sobre una gruesa capa base de espuma ultrarresistente.
¿Y vosotros?, ¿qué tipo de colchones utilizáis para mejorar vuestro descanso?