Una de las facetas menos reconocidas de Annie Leibovitz y sin duda de las más importantes es el trabajo personal que plasma su obra y vida. Enamorada hasta la médula ha fotografiado a su novia en todos los mementos de su relación, incluido la letarga enfermedad de la misma. También combina el nacimiento de sus tres hijos con la muerte de su padre.
Esta colección tiene una inspiración en las fotografías de los años 60 donde las poses son más casuales que preparadas. Para los que están cerca de Madrid es una exposición sin desperdicio y para los que tienen más problemas en acercarse la casa del libro pone a disposición el libro que plasma los trabajos más importantes.
